Esta situación puede haberse dado en todas las épocas, pero ahora nos damos cuenta más fácilmente, ya que tenemos las redes sociales, donde la gente puede descargar su enojo y su alegría de forma inmediata y hasta anónima sin tener ningún tipo de repercusión.
Antes de Vietnam la gente no tenía tantos reclamos, pero todo cambió porque durante esa guerra los norteamericanos llevaron a la prensa. No sólo informaron de lo sucedido, sino que también alertaron y crearon un fuerte enojo con el mundo y sobre todo con los norteamericanos.
Este fue un proceso de cambio que polarizó a toda la gente, ya que vieron como la guerra se estaba llevando a cabo y cómo morían miles de personas de ambos países.
Así que los veteranos y soldados que volvieron eran recibidos con reclamos en los aeropuertos en lugar de haber sido recibidos con honores.
Algo similar pudiera estar pasando en la actualidad, porque ahora se conoce tantas cosas con diferentes puntos de vista, pero aquí el problema es que la gente de todas las edades pueden dar su comentario, reclamar y hasta crear tendencia para sumar a más personas que piensan lo mismo , pero solo les falta un detonador para catapultar todas esas ideas y sentimientos,
Es voraz el ver como todas las personas se pueden quejar sobre cualquier tema y sin interesarle, porque vemos en todas las redes sociales, miles de quejas en todos los sentidos. Cuantas personas lo hacen a diario y sobre todo, es que hasta se hacen expertos en deportes, música y política.
Vivimos en un mundo difícil donde las personas públicas pueden crear tendencias negativas, si es que comentan algo que la gente lo percibió mal. Cuantos comentarios sin sentido, ahora forman parte de las tendencias y sobre todo de las noticias.
Además de todo esto, si le sumas que la gente es cada vez más sensible para todos los temas. Pero les dicen que son la generación de cristal, pero si te pones a ver, es que ya es de todas las edades, vemos como chicas de 15 años ya reclaman por todo y señoras de 50 haciendo lo mismo. NO es una generación, sino una época de reclamitis que infectaron a todas las personas y lo desfogan mediante las redes sociales.
Lo bueno es que esto en algún momento pasará y cansara al círculo psicológico de una época, para que después solo se pueda usar para conversar y reclamar, solo cuando sea requerido y no por cualquier cosa, así como sucede actualmente. El exceso de negatividad por las redes sociales, poco a poco se irá desgastando hasta cansar a la mayoría o a menos que exista alguna otra tecnología que pueda superar este proceso y hasta cambiar la sintonía actual.
Pudiera ser esto una moda? A lo mejor, pero lo que sí es cierto es que ya llevamos bastantes años con un severo proceso de malestar y de mucho inconformismo.
Las redes abrieron una forma de expresión que a la larga terminó en una forma de impactar los enojos y reclamos de todas las personas, porque de cierta manera ya no las tienes conformes con nada y atacan por cualquier detalle o situación.