Conforme van pasando los años, la mujer ha tenido un rol muy diferente dentro de la sociedad y es que ha tenido un sinnúmero de cambios, donde ahora la mujer se puede desarrollar profesionalmente o de la manera que guste, sin tener que estar dirigida por las costumbres o por su familia.
Los hombres en parte, pues prefieren a una mujer más tranquila, aunque segura de sí misma, pero a muchos les conflictúa el no tener control sobre de ellas, pero cuando tienen hijas, les gustaría que fueran independientes y poderosamente indomable para con los hombres.
Cuantos esposos que trajeron hipercontroladas a sus señoras desde novios, pero que no dejarían que eso les sucediera con sus hijas y que las prefieren fuertes sin depender de nadie. Como decía un amigo “Después de la tormenta, yo”.
La película de “Arturo el millonario seductor”, de 1981 con el actor Dudley Moore, donde reflejaba a un alcohólico que le imponían el casarse con la hija de otro millonario- y era ella una mujer sumamente sumisa, callada, no trabajaba y que era el prototipo de mujer como se veía en gran parte en los 80tas. La mujer que le gustaba era una conflictiva y ladrona mujer sin empleo.
La nueva versión ya del 2011, pues Arturo era el mismo alcohólico desenfadado, pero la mujer con la cual se casaría era independiente, trabajadora, pero sumamente calculadora y controladora. La mujer que quería era trabajadora, independiente, con objetivos y sueños, pero de nobles sentimientos.
Podemos ver como en 30 años de diferencia de estas dos películas, dieron el parámetro perfecto para desemparejar a la mujer de los 80tas a comparación del 2011.
La mujer ha tenido un cambio drástico, pero positivo para todas ellas y para los padres de familia, pero malo para muchos hombres cuando les toca tenerlas de novias o esposas. NO porque sean malas, sino que ahora ya son más independientes y pueden sacar de problemas a los hombres, si así lo necesitaran. Pero hay un parámetro donde los hombres, no quieren tanta independencia y que trabajen, porque detona a que ellas no necesiten obligatoriamente de la pareja, para que las mantenga y saque adelante.
En gran parte muchos abogados mencionan, que esto también pudiera ser factor de miles de divorcios que surgen cada año, ya que antes la mujer era súper dependiente del hombre y eso, pues les impedía dejarlos, ya que no tenían manera de cómo salir adelante, debido a que algunas se casaron muy jóvenes y no sabían hacer nada.
Pero también su cultura y enseñanza, era de estar con el marido y hacerle caso de todo lo que diga, pero sobre todo de ser una mujer sumisa y abnegada.
Es cierto que los divorcios son por varios factores, pero que en gran parte también, porque son independientes en todos los sentidos y ya muchas no están dispuestas en aguantar problemas y situaciones; cosa que antes la mujer aguantaba sin miramientos.
Pero en todas las épocas el matrimonio siempre ha sido difícil.
Ahora la mujeres, ya pueden decidir si se casan jóvenes o ya grandes, situación que ha sido algo positivo, porque tienen la posibilidad de conocer más el mundo, de estudiar lo que quieran y de trabajar. Cosa que antes era casi penado, pero también hay que destacar un detalle, y es que las mujeres de antes que se la pasaban en la casa, siempre se les veía con un semblante triste y con una mirada de perdidez, por así decirlo, ya que muchas les hubiera gustado el haber realizado sus sueños.
En las fotos de familia con las mamas y hasta con las abuelitas, podemos ver a veces esas caras y miradas de que están contentas por tener una familia, pero con un tono de tristeza.
Que pasa ahora, porque la mujer tiene otras aspiraciones más profesionales que el contar con una familia, es por eso que vemos a mujeres de mayor edad que apenas se están casando, y no como en épocas anteriores que lo hacían desde los 15, hasta los 20 años-
Por otro lado, ahora las mismas mamas y abuelitas, que fueron tranquilas y sumisas , son las que ahora les piden a sus hijas y nietas ser fuertes e independientes.
¿Porque ellas no lo hicieron con sus vidas? Porque esas son algunas de las preguntas que les hacen las hijas a sus mamas- ¿Porque no seguiste adelante y lograste tus sueños? Porque muchas de esas mamas y abuelitas, siempre cuentan que les hubiera gustado trabajar o estudiar y no solo ser una ama de casa. “Era otra época”, esa es su respuesta. Pero fueron cómodas en su vida, porque muchas nunca trataron de hacer posible lo que ellas querían.
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