Inicio » La arrogancia y crisis internas en Morena, desalienta a la gente y militancia
Gobierno Política

La arrogancia y crisis internas en Morena, desalienta a la gente y militancia

La situación interna en Morena refleja tensiones significativas entre figuras clave, marcadas por ambiciones políticas, lealtades divididas y acusaciones cruzadas, especialmente en el contexto de las elecciones de 2027. 

Andrea Chávez y Adán Augusto vs. Claudia Sheinbaum

La senadora Andrea Chávez, respaldada por el coordinador de los senadores de Morena, Adán Augusto López, ha estado en el centro de la controversia por realizar actos considerados de campaña anticipada para la gubernatura de Chihuahua en 2027.

Chávez, conocida por su cercanía con López Obrador y su apoyo previo a la candidatura presidencial de Adán Augusto, ha promovido su imagen a través de caravanas de salud en Chihuahua, financiadas supuestamente por el empresario Fernando Padilla Farfán, lo que ha generado acusaciones de corrupción y uso indebido de recursos. Estas acciones llevaron al PAN a presentar una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR) por 15 presuntos delitos electorales y penales.

Claudia Sheinbaum, como presidenta de México, reaccionó con firmeza, pidiendo a Morena establecer reglas claras para evitar actos anticipados de campaña y enfatizando los principios de austeridad y ética de la 4T. En abril de 2025, Sheinbaum anunció que enviaría una carta a la dirigencia de Morena, liderada por Luisa María Alcalde, para solicitar lineamientos que regulen las aspiraciones electorales, en una clara alusión al caso de Chávez. Sheinbaum también expresó en privado su intención de frenar la candidatura de Chávez a la gubernatura y limitar la influencia de Adán Augusto en el Senado, lo que sugiere un choque con el exsecretario de Gobernación, quien es visto como un operador cercano a López Obrador.

La reprimenda de Sheinbaum a Chávez no solo afectó a la senadora, sino que también generó fricciones con Adán Augusto. Según comentarios, el senador habría amenazado con reunirse con López Obrador en Cuba para discutir la situación, lo que indica una posible ruptura en la unidad de Morena. Esta tensión se agrava por la percepción de que Adán Augusto busca mantener su influencia en el partido, en contraste con la autoridad de Sheinbaum como presidenta.

Cruz Pérez Cuéllar-

El alcalde de Ciudad Juárez, Cruz Pérez Cuéllar, también enfrenta conflictos dentro de Morena, particularmente con Juan Carlos Loera y aliados de Andrea Chávez. Pérez Cuéllar es considerado un contendiente fuerte para la gubernatura de Chihuahua en 2027, gracias a su gestión en Juárez, que ha sido reconocida por avances en obra pública y educación. Sin embargo, su posición ha generado roces con otros aspirantes.

 

Juan Carlos Loera, senador y de los primeros militantes de Morena, acusó a Pérez Cuéllar de prácticas similares a las de Chávez, como el uso de espectaculares para autopromoción, cuestionando la congruencia del alcalde. Estas críticas parecen responder a una estrategia para debilitar a Pérez Cuéllar, quien es visto como un rival directo en la contienda por la gubernatura. 

El alcalde, por su parte, ha optado por una postura de no confrontación, declarando que su administración responde a las observaciones de auditorías y que prefiere enfocarse en el trabajo.

Además, aliados de Chávez, como Loera, han intensificado los ataques contra Pérez Cuéllar tras el regaño de Sheinbaum a la senadora, sugiriendo que buscan desviar la atención de las acusaciones contra Chávez y debilitar a otros contendientes. Esto refleja una lucha de poder en Chihuahua, donde la popularidad de Pérez Cuéllar lo convierte en un objetivo.

Brenda Ríos vs. Juan Carlos Loera

La disputa entre la diputada Brenda Ríos y Juan Carlos Loera es otro ejemplo de las fricciones internas en Morena Chihuahua. El conflicto estalló cuando Loera acusó a Ríos de liderar un “cártel del agua” durante un conflicto político en Chihuahua hace años, alineándose con los “saqueadores del agua” y en contra de los principios de López Obrador. En respuesta, Ríos denunció a Loera por misoginia, violencia política de género y corrupción, anunciando que presentaría una queja formal ante la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena.

Loera, por su parte, intensificó el enfrentamiento al declarar que solicitaría que no se acepte la afiliación de Ríos a Morena, argumentando que no cumple con el “requisito principal de amor al pueblo”. Este intercambio público, que incluyó comentarios en redes sociales, evidencia una profunda división ideológica y personal. Ríos, quien ha sido señalada por su ausencia en sesiones clave y por actitudes percibidas como distantes (como conectarse a una sesión desde un hotel de lujo en Los Cabos), enfrenta críticas adicionales que debilitan su posición dentro del partido.

Contexto general: una “guerra civil” en Morena

Las tensiones descritas no son casos aislados, sino parte de una dinámica más amplia dentro de Morena, donde la sucesión presidencial de 2024 y las elecciones de 2027 han desatado luchas por el poder. La relación entre Sheinbaum y figuras como Adán Augusto, cercano a López Obrador, está marcada por desconfianzas mutuas. Sheinbaum busca consolidar su liderazgo y mantener la unidad del partido, pero enfrenta resistencias de quienes, como Adán Augusto, aún operan bajo la influencia del expresidente.

En Chihuahua, las rivalidades entre Chávez, Loera, Pérez Cuéllar y Ríos reflejan la fragmentación regional de Morena, donde las ambiciones locales chocan con los principios nacionales del partido. La intervención de Sheinbaum, con su llamado a la ética y la austeridad, busca frenar estas disputas, pero también ha generado reacciones de descontento, como la amenaza de Adán Augusto de recurrir a López Obrador.

 

Por otro lado, la falta de reglas claras para los procesos internos de Morena, como señaló Sheinbaum, alimenta estas pugnas. La presidenta insiste en recuperar la “mística” del partido, promoviendo campañas austeras y reglas que eviten el nepotismo y los actos anticipados, pero la implementación de estas medidas enfrenta resistencias internas.

Rivalidades-

La “guerra civil” en Morena es un reflejo de las tensiones entre el liderazgo de Sheinbaum y las ambiciones de figuras como Adán Augusto y Andrea Chávez, así como de las rivalidades regionales en Chihuahua entre Cruz Pérez Cuéllar, Juan Carlos Loera y Brenda Ríos. Estos conflictos, exacerbados por acusaciones de corrupción, misoginia y campaña anticipada, amenazan la unidad del partido en un momento crítico, cuando Sheinbaum busca consolidar su proyecto de transformación. Aunque la presidenta ha tomado medidas para imponer disciplina, las lealtades divididas y la influencia de López Obrador siguen siendo obstáculos. Las elecciones de 2027 serán un punto clave para determinar si Morena puede superar estas fracturas o si las ambiciones individuales prevalecerán.

 

 Para abordar esta “guerra civil” y evitar que el partido se fracture, Morena y sus liderazgos deben implementar medidas estratégicas que promuevan la unidad, la transparencia y la disciplina interna, sin perder de vista los principios de la Cuarta Transformación. Deben considerar la percepción de que algunos líderes actúan como si ya tuvieran asegurado el “pastel” del poder:

  • Establecer reglas claras y procesos democráticos internos
  • Acción: La dirigencia nacional, encabezada por Luisa María Alcalde, debe acelerar la emisión de una convocatoria con lineamientos claros para las candidaturas de 2027, como propuso Claudia Sheinbaum. Estas reglas deben incluir plazos estrictos para evitar actos anticipados de campaña, criterios de selección basados en méritos y lealtad a los principios de Morena, y sanciones por violaciones.
  • Razón: La falta de claridad en los procesos internos fomenta la competencia desleal y las acusaciones cruzadas, como las de Andrea Chávez o Juan Carlos Loera. Un proceso transparente y equitativo reduciría la percepción de favoritismos y frenaría las ambiciones prematuras.
  • Impacto: Esto fortalecería la confianza de la militancia y evitaría que las disputas escalen a niveles que debiliten al partido frente a la oposición.

 

  • Fomentar la unidad a través de la mediación y el diálogo
    • Acción: Sheinbaum y la dirigencia deben organizar foros o mesas de diálogo entre las corrientes internas, incluyendo a figuras como Adán Augusto, Ricardo Monreal, y líderes regionales como Cruz Pérez Cuéllar. Estos espacios deben priorizar la reconciliación y el compromiso con una agenda común.
    • Razón: Las tensiones entre facciones, como las de Adán Augusto contra Sheinbaum o Loera contra Brenda Ríos, reflejan una lucha por el control que ignora el proyecto colectivo. La mediación, respaldada por el liderazgo moral de López Obrador (si aún ejerce influencia), puede evitar fracturas
    • Impacto: Un partido unido proyectaría fortaleza y evitaría que la oposición capitalice las divisiones, como advirtió Ricardo Monreal.

 

  • Reforzar la democracia interna y combatir el oportunismo
    • Acción: Morena debe implementar elecciones internas abiertas y supervisadas por el Instituto Nacional Electoral (INE) para seleccionar candidatos, como se hizo en 2020 para la dirigencia. Además, debe revisar la incorporación de “chapulines” (militantes de otros partidos) y establecer filtros para garantizar que los aspirantes compartan los valores de la 4T.
    • Razón: La percepción de que algunos líderes actúan como si el “pastel” ya fuera suyo, surge de la falta de meritocracia y la llegada de oportunistas, lo que genera rechazo entre las bases. La debilidad institucional de Morena, dependiente del carisma de López Obrador, agrava este problema.
    • Impacto: Fortalecer la democracia interna daría voz a la militancia, reduciría las pugnas por candidaturas y consolidaría a Morena como un partido de izquierda coherente, no solo una “empresa electoral”.

 

  • Promover la austeridad y la ética para frenar acusaciones de corrupción
    • Acción: La Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena debe investigar con imparcialidad las acusaciones de corrupción, como las de Andrea Chávez por sus caravanas de salud o las de Brenda Ríos por el “cártel del agua”. Se deben imponer sanciones ejemplares a quienes violen los principios de austeridad y transparencia.
    • Razón: Las acusaciones cruzadas alimentan la narrativa de que Morena se “come entre sí” por ambición personal, dañando su credibilidad. Sheinbaum ha enfatizado la necesidad de recuperar la “mística” del partido, lo que incluye combatir prácticas que contradigan la ética de la 4T.
    • Impacto: Demostrar compromiso con la honestidad fortalecería la confianza de los votantes y desarmaría críticas de la oposición, que ya señala la “autodestrucción” de Morena.
    • Asumir los errores y no dejar que la arrogancia salga a flote en sus discursos y entrevistas, tal como lo hace Gerardo Fernández Noroña y Andrea Chávez. El cinismo siempre aleja a la gente.

  • Fortalecer la conexión con las bases y reorientar el enfoque al proyecto de nación
    • Acción: Los líderes deben priorizar el trabajo territorial y la promoción de los logros de la 4T, en lugar de centrarse en campañas personales.
    • Razón: La desconexión con las bases, evidenciada por la pérdida de alcaldías en 2021, es un riesgo cuando los líderes se enfocan en sus ambiciones. La fortaleza de Morena radica en su carácter de partido-movimiento, no en disputas elitistas por el poder.
    • Impacto: Reconectar con la militancia recordaría a los líderes que el “pastel” no está garantizado y que el apoyo popular depende de resultados tangibles y unidad.

 

  • Gestionar la influencia de López Obrador con cuidado
    • Acción: Sheinbaum debe equilibrar el respeto por el legado de López Obrador con la consolidación de su propio liderazgo, evitando que la influencia del expresidente fomente divisiones, como en el caso de Adán Augusto. Esto implica negociar con él un rol de consejero, no de árbitro en las disputas.
    • Razón: La dependencia de Morena del carisma de López Obrador ha sido tanto una fortaleza como una debilidad, y su intervención en conflictos (como en 2023 con Ebrard) puede exacerbar las tensiones si no se canaliza correctamente.
    • Impacto: Un liderazgo claro de Sheinbaum, respaldado pero no subordinado a López Obrador, proyectaría estabilidad y evitaría que las facciones busquen su apoyo para ganar disputas.

Reflexión final

Las disputas en Morena no son solo una lucha por el poder, sino un síntoma de la transición de un partido-movimiento centrado en López Obrador a una organización que debe institucionalizarse bajo el liderazgo de Sheinbaum. La percepción de que los líderes ya tienen el “pastel” de su lado refleja una arrogancia que puede costarle caro al partido si no se corrige. Las soluciones propuestas —reglas claras, diálogo, democracia interna, ética, conexión con las bases y un manejo cuidadoso de la influencia de AMLO— buscan fortalecer la unidad y recordar a Morena que su hegemonía no está garantizada. 

Sin estas medidas, las divisiones podrían fracturar al partido, como advierten voces como Ricardo Monreal y analistas, dando una oportunidad a la oposición para recuperar terreno.

Nota: Si bien Morena ha mostrado resiliencia frente a crisis internas, como en la selección de Sheinbaum en 2023, el contexto actual exige una respuesta más estructural para evitar que las pugnas en Chihuahua y a nivel nacional se conviertan en una crisis mayor.