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, April 28, 2024 in
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Al censurar la comida chatarra se promueve la salud o se quita la libertad de elegir?

Este es un tema que está con mas auge, porque ya muchos políticos pretenden acabar con la libertad para poder comprar diversos productos. Claro que se volvió una situación con muchos puntos de vista, porque algunos están a favor y otros completamente en contra, pero dentro de esto, es que ambas partes tienen la razón. 

Una de estas propuestas, es precisamente de acabar con la publicidad para la promoción de la comida que le llaman chatarra. Con ello tambien acabarán con miles de negocios y estrategas de la mercadotecnia, ya que muchos de ellos viven de esta industria. 

Los productos afectados son varios, entre ellos son los refrescos, papas, totopos, pastelitos, pays, galletas y varios,que son considerados como comida chatarra, debido a que cuentan con mucho azúcar y con ingredientes que son nocivos para la salud, según lo indicado. 

Pero en este sentido, beneficia la censura y negar la comida chatarra? Algunos dicen que se les está coartando la libertad para poder decidir qué comer y tomar, pero por otro lado también se menciona que esto va solamente dirigido hacia los menores, ya que muchos de ellos no saben discernir de un producto a otro, pero en este sentido, pues se debería incluir a muchos negocios de comida. Pero esto ya se dará también poco a poco.

Al censurar y al etiquetar cada producto de que son altos en grasas y azucares, también pudiera tener una repercusión positiva para los menores, pero por otro lado podemos tener algunos ejemplos como el “Dare” en EUA, donde se les habla a los niños dentro de las escuelas, sobre la repercusión de las drogas, pero aun así, se sigue consumiendo sin parar.

Al decir que no de las cosas, también hacen que la gente los compre, todo por contradecir a la autoridad, así como lo hicieron con la música en Estados Unidos con las canciones que contenían malas palabras y temas sobre las drogas, malvivencia y satanismo. Lo que hicieron es ponerle etiquetas como “Explicit lyrics”. El resultado es que la gente los compraba más y muchos solamente buscaban discos y cassettes con esta etiqueta. 

La intención de estas propuestas, es acabar con la publicidad llamativa dentro de estas envolturas, porque los niños los compran al ver tantos comerciales y porque su empaquetado es poderosamente llamativo. 

Mucha gente ha reclamado, porque les quitan su libertad de poder decidir qué tomar y comer, pero la propuesta también tiene razón, ya que mucha gente muere por el exceso de bebidas y comidas azucaradas, ya que les detona diversas enfermedades. Ambas situaciones son válidas, pero aquí el detalle, es que esto va enfocado para que todos lo menores, no consuman estos productos y lleven una vida más sana desde tempranas edades. 

Con esto, estamos hablando de atacar a muchas empresas de gran nivel que se dedican solamente a producir este tipo de comida. También muchas empresas abusaron en hacer productos de muy mala calidad, como eso que se veía en redes sociales, donde mencionaban que el chocolate de los pastelitos eran de grasa animal con colorante. Viendo esto, es que en parte las empresas deben proponerse en producir comida mas saludable y con mejores ingredientes.

Es como cuando a mediados de 1900 el gobierno estadounidense ,les exigió a varias empresas de alimentos como Kellogg ‘s, Post y Heinz,  para que implementaran medidas certeras sin mentiras, dentro de su publicidad, debido a que muchos de ellos anunciaban que su comida curaba enfermedades, cosa que no era cierta. Uno de los promotores de esta propuesta fue el empresario Heinz, precisamente.

Hablamos de lo malo, pero también existe la parte donde la gente tiene el derecho de comer lo que ellos quieran, porque destacan que ya las personas pueden y deben decidir sobre sus vidas, aunque esto no pudiera ser muy sano. 

Indican que ya estamos en una sociedad adulta, donde la población debe tener su propia responsabilidad y si quieren tomarse un refresco azucarado, junto con papitas y chocorroles, lo deben hacer si así lo desean. Así que bajo estos conceptos, la población deberá decidir, si siguen consumiendo estos productos.

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